Localización: Carnicería, 11.15 a..m.
Situación: Cuando llegamos, había unicamente 3 personas por delante (es normal pensar que cuando le toque al último de los 3 que hay, nos toca a nosotros). Llegan personas después que van pidiendo la vez.
Escena: Un señor mayor que estaba delante de nosotros andaba un poco despistado y cuando le ha llegado el turno, después de unos 15 minutos de espera, se lo hemos indicado educadamente Iker y yo. Resulta que estaba tan despistado que había cometido el gran crimen de estar delante del mostrador y no pedir la vez (al igual que nosotros), sino que la pidió más tarde (a gente que estaba detrás de nosotros en el orden) al darse cuenta de que no la había pedido. Pues parece ser también que una señora había llegado y pedido la vez y este señor le había indicado que él era el último (cosa que no era cierta por simple despiste). Aquí voy a apuntar una cosa, hay que tener en cuenta que la gente nos ponemos a lo largo del mostrador de la carnicería por lo que a esta señora yo ni la había visto llegar.
Escenita: Total que al insistir Iker y yo en que pidiese él, la señora que se suponía iba detrás de l pobre hombre ha empezado a decir cosas cómo 'claro, pero es que así yo ya no sé cuando me toca', 'porque si él pasa ahora yo ya pierdo mi orden...', y lo mejor es que coge y le dice al carnicero, 'pues me voy...'. ¡¡¡Señora, usted está para encerrar!!!
Conclusión: Es increible. Un señor no pide la vez porque tiene memoria o por despiste, nosotros seguimos el orden riguroso de llegada y le decimos que le toca pedir y encima nos increpan dando a entender que no podemos dejarle pasar porque se pierde el turno...
En serio, hay que relajarse un poquito...
Lo peor de todo, es que tampoco tengo nada sobre lo que escribir (apuestas, viajes, pisos...). De lunes a viernes, mi vida es como el día de la marmota y el horario laboral no me deja mucho margen. Quizás por eso he decidido intentar, nuevamente, retomar viejas costumbres con las que ocupar algo del tiempo libre en que lo único que hago al final es dormir...menuda pérdida de tiempo!!
Veamos qué tal se me da esta vez.
P.D: En este año último año, he hecho un montón de cosas como por ejemplo, casarme e ir a New York, San Francisco, Las Vegas y Puerto Vallarta. Que fuerteeee! y qué rápido pasa...
Resumiendo, películas vistas estas vacaciones: 0. Entre el poco ánimo, y el escaso tiempo después del añito 'complicado' que se me presenta no tengo nada clara la apuesta. Aunque también es verdad que siempre puedo boicotear al contrario, algo totalmente lícito teniendo en cuenta que no se han puesto reglas que digan lo contrario.
En cuanto a la apuesta sobre películas... teniendo en cuenta la constancia que mantengo en el blog, queda claro que empecé con ganas y al final ninguno ganamos la apuesta.
Eso sí, año nuevo, nuevo intento. Revalidamos: esta vez hemos decidido cambiar los términos. Yo tengo que ver 150 películas pero esta vez sin limitación alguna en nota con el firme compromiso de evitar cualquier morralla que se precie e Iker tiene que leer 25 libros en propiedad y con el firme compromiso de que contengan más de 100 páginas.
Pues sí! El 'Cow Parade' está ya en Madrid (decir que en Bilbao ya hubo una exposición similar en 2001) y aquí dejo una muestra... la vaca de 'El País' en plena Gran Vía. Habrá que hacer todo el recorrido!
Esto describe un poco como estoy... dejando pasar el tiempo sin hacer nada. He decidido que no puede ser, así que aquí estoy de nuevo, con mis mejores intenciones. A ver si dura... de momento me voy a casa de vacaciones unos 10 días (¡que ganas!) y dudo que use el ordenador hasta la vuelta. Por si acaso... ¡Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo a todos!
Nunca viene mal hacer una escapadita de vez en cuando para conocer una capital europea. Esta vez le ha tocado el turno a Dublin.
Llegamos un sábado por la noche así que sólo nos dio tiempo a integranos en el ambiente con una pinta en mano sin pasarse porque tocaba madrugar al día siguiente.
Domingo: Parque St Stephens (y el busto de james Joyce), Trinity College, Grafton Street para ver a Molly Malone, Iglesia St Crist, St Patrick, Temple bar y pintas para acompañar.
Lunes: Kilmainham Goal y la fábrica de Guiness (como no).
Me ha encantado. Es muy tranquila, muy verde y la gente es de lo mejor, o por lo menos eso transmiten...muy sonrientes, muy educados, nobles (vamos, parecidos a los bibainos...). En resumen, entrañable.